El director británico Michael Powell y el director húngaro Emeric Pressburger son el duo de directores que han trabajado juntos sin tener parentesco más famoso de la historia del cine. A ellos debemos varias obras maestras como A vida o muerte, Los cuentos de Hoffman, El Coronel Blimp, Narciso negro o Corazón salvaje. Michael Powell destacó también por separado con El ladrón de Bagdad y El fotógrafo del pánico. The archers, la productora de ambos, es una de las más importantes del cine británico.
La más famosa de sus películas es Las zapatillas rojas. Basada en el cuento de Hans Christian Andersen, cuenta la historia de un ballet en el que una bailarina que no puede dejar de bailar tras comprar unas zapatillas rojas, y de la artista que interpreta ese ballet, que se debate entre el amor entre un empresario y un compositor. Destaca por los minutos finales de ballet.
De la música de ese ballet se encargó Brian Easdale, un excelente compositor británico actualmente no muy recordado, que compuso las bandas sonoras de los filme de Powell y Pressburger desde Narciso negro. Su obra más famosa es el filme del que estoy hablando, gran banda sonora justa ganadora del Oscar.
Muy buen año de bandas sonoras nominadas: Nido de víboras (Alfred Newman), Belinda (Max Steiner), Juana de Arco (Hugo Friedhofer) y Hamlet (William Walton).
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