Cuando se hace un final sorpresa para una película hay que tener mucho cuidado, se puede caer en el ridículo si no se hace bien o no se tiene un buen guión. Es lo que pasa con esta Milla 22, cuando llega el final, no tiene ni pies ni cabeza y muestra que el guión tiene el mayor boquete de lógica que recuerdo en mucho tiempo. El resto de la película no ayuda, es una aburrida película sobre un grupo de operaciones especiales que tras una misión fallida (pésimamente contada en el guión por muy bien que esté rodad, no llegamos a sabemos a saber qué buscaban) recibe la orden de sacar de un país extranjero a un funcionario local con un importante secreto. Flojo reparto, con un Mark Wahlberg en su peor línea, un John Malkovich que no sé qué pinta aquí y una Ronda Rousey que será muy buena en artes marciales, pero como actriz es patética, solo se salva siendo generosas Iko Uwais. Filme olvidable, otro más en la errática carrera del director Peter Berg, que vuelve a las andadas tras las aceptables Marea negra y Dia de patriotas.
Quizás las expectativas que tenía con El reino eran excesivamente altas, el caso es que siendo un filme notable, no me parece sobresaliente. Intentaré explicarme sin caer en spoilers.
Entre sus méritos: es un muy potente trhiller, tiene algunas de las escenas mejor rodadas del cine español, especialmente una persecución en una carretera. Tiene además un gran reparto, donde destacan Antonio de la Torre, Josep Maria Pou, Ana Wagener y Francisco Reyes; por el contrario, Luis Zahera me parece demasiado sobreactuado, y el personaje de Bárbara Lennie es el que menos me convence de la película.
Defectos:
Duración excesiva: dos horas y cuarto me parecen muy muy largas, sobretodo al final (luego hablaré de él)
Se ha quedado corta y algo desfasada. Tras los acontecimientos de los últimos meses (masters, cremas, plagios, duques enpalmados, etc), lo que cuenta es casi como una caricia, dice el director que no quería parecer exagerado, pero es que aquí creo que sí hay que ser exagerado, la realidad es mucho más esperpéntica que la ficción que cuenta Sorogoyen, no supera la declaración de Bárcenas en B o la corrupción moral que habia en la serie Crematorio.
Personajes algo planos: creo que no evolucionan (especialmente de la Torre, por bien que esté el actor), que están hechos de una pieza (no basta con mariscadas o relojes de oro, eso es la superficie, cualquier político corrupto que veo en la televisión es más jugoso que lo que veo en el filme) y maniqueos, no hay grises, o todos corruptos o alguno (pocos) sano.
Final muy discutible: No lo contaré, creo que he dicho más arriba lo que no me gusta y creo que el final lógico es el de la carretera, aunque la película quede con final abierto, si no se puede superar eso, lo que viene después sobra. Y lo que viene después es redundante, repetitivo y maniqueo, me sobra, es un subrayado moralista en una película que no lo necesita, el moralismo ya estaba implícito en las imágenes y el comportamiento de los personajes, no hace falta remarcarlo
Lo dicho, los defectos no me pesan lo suficiente para cargarme un filme que tiene muy buenas cosas, pero sí me pesan lo suficiente como para quitarle un punto. Sorogoyen es un excelente director, pero yo personalmente me quedo con sus dos primeros filmes.
Mientras un hombre pisaba la Luna por primera vez (aunque no opinen lo mismo los paranoicos), el prestigio de la familia más famosa de EEUU empezaba a resquebrajarse en una pequeña isla. Es sabido que el accidente mortal de Chappaquiddick acabó con las aspiraciones a la presidencia de Ted Kennedy acrecentó la maldición de la familia, y ahí por supuesto había una película. El problema es que este Escándalo Ted Kennedy (por una vez entiendo el cambio de título en España, Chappaquiddick le debe sonar a chino a más de uno en España), siendo aceptable, está lejos de ser redondo. Le falta chispa, la realización de John Curran es demasiado plana, le sobra cierto respeto a Kennedy y Kate Mara sigue siendo una actriz bastante mediocre. Pero tiene el interés de la historia, el mostrar cómo manejaron los hilos los ayudantes para suavizar el escándalo y dos actores en plena forma, el siempre solvente todoterreno Jason Clarke y un Bruce Dern que se adueña de la pantalla cada vez que aparece. Correcta y recomendable a pesar de sus altibajos.
El caso del productor fallecido hoy Gary Kurtz es sumamente extraño, de tocar el cielo con sus primeras producciones pasó al casi completo olvido. Después de comenzar con un filme de culto como Carretera asfaltada en dos direcciones, su alianza con George Lucas dio lugar a tres taquillazos como American graffiti, La guerra de las galaxias y El imperio contraataca, pero a partir de su separación con Lucas empieza a encadenar un fracaso comercial tras otro: Cristal oscuro funcionó bien, pero después Oz un mundo fantástico, La furia del viento y la versión de animación de El ladrón de Bagdad son rotundos fracasos. Desde entonces le perdí la pista, los filmes que veo suyos en IMDB no los conozco, descanse en paz un productor de muy breve éxito.
