domingo, 27 de noviembre de 2016

The neon demon



Lo que ha pasado con el último filme del marciano con pasaporte danés Nicholas Winding Refn (sigo sin haber visto Walhalla rising y las anteriores a Bronson, pero por los datos que tengo y las imágenes que he logrado encontrar, me parece que la única "normal" es Drive, la más convencional, la más premiada y la que menos me convence por parecerme un pastiche de Walter Hill y el polar francés), The neon demon, es digno de estudio: masacrada por la crítica con un sadismo y una mala leche como pocas veces se ha visto en un festival, y premiada con el premio de la crítica en el Festival de Sitges (me imagino que por otros críticos). Pocas veces se ha visto una reacción tan extrema y polarizada, quizás en algunos trabajos de David Lynch.

Y ahora que la he visto, lo entiendo. The neon me fascina como obra de arte como me puede fascinar un cuadro abstracto, una perfomance provocadora, una versión de Shakespeare de la primera época de Àlex Rigola o un número de baile interpretado por un paralítico (esto último ocurrió en un espectáculo de danza en los 80 y lo que le dijo la crítica especializada está a la altura de lo que han dicho de The neon demon), pero a un crítico "clásico" le puede parecer anticine, ya que se salta a la torera todas las normas que rigen una narración tradicional: carece prácticamente de trama (lo de la aspirante a modelo, una caperucita en un mundo de lob@s, es casi una excusa para una sátira muy feroz contra el culto al cuerpo), es muy difícil de seguir y su final, para mí lógico según el desarrollo de la película, desemboca en un epílogo desconcertante cuando se supone que se ha acabado la historia en la escena del fondo de la piscina. 

Pero el caso es que me gusta, y mucho. Refn sigue el camino trazado antes por Buñuel, Lynch y actualmente Yorgos Lanthimos, y ofrece una rocambolesca y muy surrealista pesadilla que parece un cruce entre Caperucita, Blancanieves, Pigmalión y Showgirls, con alguna salida al gore y muchísimo humor negro, donde lo que menos importa es de qué va la película, y con excelentes interpretaciones de todo el reparto (he oido por ahí que Elle Fanning era un error de casting por parecer todavía una niña, yo por el contrario creo que está buscado expresamente y es un acierto, si se trata de una iniciación a la perversidad y al culto al cuerpo, por fuerza tiene que ser una actriz muy joven). Amantes del cine "clásico" mejor abstenerse, para mí es una de las mejores películas del año

Nota sobre 10: 9



sábado, 26 de noviembre de 2016

La reina de España



18 años han transcurrido entre La niña de tus ojos y su secuela, La reina de España, y creo que se echa en falta una cosa clave entre una y otra: Rafael Azcona, se nota muchísmo su ausencia

Si la primera era una buena comedia (ojo, no de las mejores de Fernando Trueba) con un sólido guión, la segunda peca especialmente de un guión deslavazado, carente en general de chispa cómica y de situaciones y gags con fundamento, y creo que es el principal problema de un filme gris (un filme que representa una época gris no tiene que ser gris) y en general mediocre y aburrido. Como consecuencia de ello, no acaba de conectar bien la historia del rodaje de un filme sobre Isabel la católica hecho por judíos (para mí el mejor chiste de la película) con la captura y fuga de Cuelgamuros del personaje de Antonio Resines, y esa falta de conexión afecta un filme que no acaba de decantarse por la comedia o la tragicomedia y se queda en tierra de nadie. Solo se salva por las interpretaciones de su sólido reparto; aunque Penélope Cruz creo que no está tan bien como en la primera, mantiene el tipo, Antonio Resines, Rosa María Sardà, Loles León, Santiago Segura y Jorge Sanz siguen estando brillantes como secundarios, y las nuevas aportaciones de Mandy Patinkin, el gran Clive Revill (hacía tanto tiempo que no sabía nada de él que pensaba que estaba muerto) y el director Arturo Ripstein son muy jugosas, mucho más discutibles son las de Chino Darín (de momento no parece haber heredado el talento de su padre, y además su personaje es el más plano) y un Cary Elwes que de tanto retoque estético parece la momia del protagonista de La princesa prometida (a Patinkin le ha respetado más la edad). No es un desastre absoluto, pero me parece una decepción y una de las películas más flojas de Trueba.

Nota sobre 10: 3



David Hamilton 1933-2016




Hablar de David Hamilton en el momento de su fallecimiento es para mí un marronazo, dadas las acusaciones recientes que pesan sobre él de pedofilia y violación de menores. Pero fue director de creo que seis películas y tengo que ponerlo, además de ser películas que creo que no están prohibidas,  (no creo que nadie me acuse  de incitación a la pedofilia) por lo tanto tengo que hablar de él como director, no entraré a comentar su carrera como fotógrafo ni tampoco las acusaciones, son muy recientes y no tengo pruebas en un sentido u otro.

Hamilton como director no me resulta demasiado interesante, aunque su película más famosa, Bilitis, tuvo gran éxito en los 70, en parte debido a la banda sonora del para mí siempre discutible Francis Lai. Incidía en sus famosos flous y en sus jovencitas desnudas, pero no pasaba de ser un discutible esteta, un discípulo de Just Jaeckin con ínfulas, también fueron bastante famosas en su momento otras películas suyas como Tiernas primas y Un verano en Saint Tropez. Descanse en paz uno de los fotografos más famosos del siglo XX y un personaje polémico, incluso antes de las acusaciones recientes.

sábado, 19 de noviembre de 2016

Animales fantásticos y dónde encontrarlos




Lo primero, palo a un montón de webs, incluidas Filmaffinity e IMDB que han caído en el error. Circulaba desde hace días la noticia de la aparición en el filme Animales fantásticos y dónde encontrarlos, en que se comentaba la aparición como cameo de un conocido actor que tendría más protagonismo en posteriores películas. El problema es que cuándo se ve la película, es algo más que un cameo: es una sorpresa final del filme que afecta a uno de los personajes de la película, personaje que aparentemente no tenía nada que ver con el asunto (salvo alguna pista dispersa que solo se  puede apreciar si uno recuerda bien el universo literario de J. K. Rowling, y un curioso dato de otra película que no tiene que ver nada con las obras de Rowling, pero que recordé enseguida al ver el final). Afectando gravemente al final del filme el saber que sale ese actor, yo lo considero un spoiler en toda regla, no voy a hacerlo, y creo que muchos no deberían haberlo hecho. Por lo tanto, premio Pico de oro a muchas webs.

En cuanto a la película en sí, quien me siga desde 2005 en mis blogs, sabe que nunca he sido fan de las películas de Harry Potter (salvo la tercera), pero esta me ha sorprendido gratamente. Funciona como precuela o spin of de la saga, pero también como película independiente, una muy divertida y entretenida película de género fantástico, con más imaginación creo que la saga original, un excelente trabajo de recreación de la época de los años 20. Y un excelente reparto, Eddie Redmayne está muy bien como despistado mago que pierde una maleta con todo tipo de seres, y le acompaña muy bien Katherine Waterston, aunque la palma se la lleva creo  el poco conocido actor Dan Fogler, que borda el personaje de Nomaj. El trabajo de Colin Farrell en su ambiguo personaje me parece más flojo, y Jon Voight y Samantha Morton tienen papeles más cortos y no tan lucidos. Estupenda banda sonora de James Newton Howard, muy alejada de la de John Williams para Harry Potter, aunque se le homenajee en algún momento.

Nota sobre 10: 7



domingo, 13 de noviembre de 2016

No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas



Al Karma no le echaré la culpa si soy gilipollas (a veces lo soy, no tengo remedio), ni diré que el nuevo filme de María Ripoll es Bridget Jones a la española (aunque el camisón de Verónica Echegui ayuda a compararla). Más bien es la historia de siempre, muy clásica en la comedia romántica, del patito feo que se convierte (o no) en cisne. No soy muy fan de Ripoll (todavía recuerdo con horror Ahora o nunca), pero el filme me convence como producto comercial. tiene buenos gags, no aburre a pesar de lo previsible de la trama y desenlace, y tiene como protagonista a una excelente actriz como Verónica Echegui, bien acompañada por David Verdaguer, Alba Galocha y Elvira Mínguez, menos por un Alex García al que sigo sin encontrar el punto como actor y un Jordi Sánchez tan histriónico como casi siempre (le prefiero como autor teatral). No me ha disgustado, y tal como está el patio en el terreno de la comedia romántica, no es poco.

Nota sobre 10: 6



sábado, 12 de noviembre de 2016

Jack Reacher: Nunca vuelvas atrás



No conozco las novelas de Lee Child sobre Jack Reacher, no sé si el problema estaba ya en ellas lo único que puedo decir es que las dos adaptaciones al cine protagonizadas por Tom Cruise no acaban de convencer aún siendo entretenidas. En esta segunda se nota más de lo que pecaba la primera: intriga plana y esquemática (le falta chicha, y aquí son demasiado evidentes los villanos, aunque el para mí desconocido Patrck Heusinger le da cierto empaque al esbirro de nombre desconocido) y personajes de telefilme de sobremesa (la historia de la hija de Cruise parece metida con calzador). No es un desastre, no acaba de aburrir del todo y por eso le doy el aprobado, pero es una más del montón, a la que le sobran un montón de minutos (lo que he dicho de la hija lastra sobretodo un  climax y un epílogo excesivamente alargados) y le faltan escenas de acción mejor logradas y un director más atinado que el casi siempre anodino Edward Zwick. Eso sí, Tom Cruise sigue con el carisma intacto, los años todavía creo que todavía no le pesan (pero que no se los quite, que lo de que dicen en la película de que tiene 40 no cuela), pero necesita mejores guiones y no creo que repita como Reacher (la primera no hizo taquilla para tirar cohetes y esta ha pinchado en USA). Simplemente para pasar el rato, discreta.

Nota sobre 10: 5







100 metros




La historia de Ramón Arroyo, un hombre que con esclerosis múltiple logró participar en diversas pruebas deportivas de resistencia, ya había sido contada en televisión en un programa de Canal +, y ahora el director Marcel Barrena la cuenta en su primer largometraje no documental, 100 metros. El resultado no es redondo, peca de algunos tópicos de películas sobre superación personal (curiosamente hay una película francesa reciente, Con todas nuestras fuerzas, que se le parece bastante, aunque cuenta un caso distinto) y le sobra algún personaje que no interesa como el de María de Medeiros, pero no aburre, Dani Rovira está menos cargante que en sus últimas comedias. Alexandra Jiménez y Karra Elejalde están muy bien, y tiene un grupo de excelentes secundarios como David Verdaguer, Clara Segura o Bruno Bergonzini. Aún siendo un filme sin sorpresas, es recomendable.

Nota sobre 10:6



viernes, 11 de noviembre de 2016

Robert Vaughn 1932-2016












Más de uno habrá simplificado con decir que era el último magnífico del filme de 1960 (aunque en realidad estaba también en otra versión, Los siete magníficos del espacio). pero el hoy fallecido actor Robert Vaughn era mucho más, un excelente actor demasiado infravalorado por alguna parte de la crítica, que brilló como secundario en cine, pero que yo creo que la televisión le dio todavía más fama. Y nos deja, aparte de las dos versiones en que participó de Los siete magníficos, otras como La ciudad frente a mí (el papel que lo lanzó en el cine y su única nominación al Oscar), Bullit, El coloso en llamas o Supermán. Y en televisión, hay para tomar, las más populares Los protectores, El equipo A, y por encima de todas, el que es su personaje más icónico, el del agente Napoleón Solo de la serie El agente de CIPOL. Descanse en paz.

domingo, 6 de noviembre de 2016

Sully




El "viejo, acabado y fascista" (algunas de las lindezas que le han dicho por varias de sus últimas películas, yo sus pequeños patinazos se los perdono a alguien que ha estado delante o detrás de las cámaras en un buen puñado de las mejores películas de la historia del cine desde 1964, se ha ganado el respeto con creces) Clint Eastwood sigue dando guerra a los 86 años, y sigue siendo más moderno que algunos pegaplanos actuales.

Sully puede considerarse si se quiere una obra menor en la filmografía de alguien que ha dirigido Sin perdón, Birdy o Million dolar baby, pero es una película excelente. Antes de verla, leí ayer una entrevista en que comentaba que se metió en el proyecto cuando vio que había una película en lo que ocurrió en la investigación tras el accidente aéreo y posterior rescate en el río Hudson de 2009. Le doy la razón, lo que en manos de otro director se habría convertido en una suerte de Aeropuerto 2009 (tampoco hubiese estado mal, pero hubiese sido más convencional), Eastwood lo lleva a su terreno (el del héroe desencantado enfrentado al sistema y en la fina línea que separa lo legal de lo ilegal, a veces no sé si Harry Callahan es un fascista o un nihilista desencantado crepuscular al que le faltan dos telediarios para convertirse en un villano) y ofrece la radiografía de un héroe común, sin necesidad de usar pistola, y con dudas en buena parte de la película de si ha hecho lo correcto (el flashback en el bar y los fantasmas-pesadillas de un choque en Nueva York post 11S planean en la primera parte de la película). Y en todo el filme hay dos cosas que llaman la atención: la falta de maniqueismo (los burócratas se muestran duros, pero cumplen con su trabajo, al igual que Sully, quien parece que pidió que no se les pusiese con villanos; también la alegoría encubierta del filme: creo que con toda la intención de viejo zorro, Eastwood está hablando de él mismo como cineasta, como héroe solitario enfrentado a unos cuantos gansos y a un programa de ordenador que le dice que está anticuado y que no hace las películas como deberían hacerse. Excelente interpretación de Tom Hanks (menos perdido que en Inferno, aquí con un buen personaje al que agarrarse sigue mostrando que es uno de los grandes actuales), bien acompañado por Aaron Eckhart y menos por Laura Linney, que tiene poco papel al que agarrarse. No sé cuántas películas le pueden quedar ya en la recámara a Eastwood, me temo que pocas salvo que llegue a la longevidad de Manoel de Oliveira, pero por mí que continúe mientras el cuerpo le aguante, aunque de vez en cuando tropiece.

Nota sobre 10: 8


sábado, 5 de noviembre de 2016

Yo, Daniel Blake





Que quede claro: pedirle sutileza a Ken Loach es como pedirle a Mariano Rajoy una gestión política de izquierdas, pero cuando el director británico ha estado fino (cosa que no ha pasado en los últimos tiempos, sus últimas películas no han estado a la altura de sus mejores tiempos, los de comienzos de los 90) ha sido un atinado observador de un gobierno y administración británico-europeos aberrantes  y un gran director y descubridor de actores.

Yo, Daniel Blake tiene toda la pinta de ser su cierre de filmografía por las palabras que dijo en el Festival de Cannes (luego es capaz de desdecirse y hacer más cine, aunque resulta bastante paradójico en él que le produzcan algunos de los que suele criticar, la BBC y la Lotería británica), y creo que en lo bueno y en lo malo sería un buen broche de carrera, me parece su mejor película reciente (aunque no merezca en mi opinión la Palma de Oro, debía haber sido para otro veterano que la merecía más, Verhoeven, hubiese encontrado más lógico para Loach una Palma de honor, que no honorífica). La visión de la burocracia alrededor de la prestación del paro es tremenda (tirando a tremendista, pero me la creo, no he llegado a los extremos de la película, pero he sufrido unas cuantas situaciones kafkianas al respecto que no la desmerecen) y aterradora, y Loach pone el dedo en la llaga como nadie lo suele hacer (su discípula Iciar Bollaín nunca ha llegado tan lejos como el maestro), y de nuevo tiene una sólida base en la interpretación de un actor, Dave Johns, para mí desconocido, que resulta muy creible como parado enfermo que se ve impotente para cobrar la prestación del paro, Hayley Squires también está bien como madre soltera, pero su papel es más previsible. ¿Peros a la película? Los de siempre en Loach, exceso de maniqueismo rayante en el panfleto (la escena que da nombre a la película parece una arenga a las masas, un subrayado al estilo de El olivo de Bolláin que sobra por redundante), más un final muy previsible. Buena película de Loach, veremos si realmente es la última o no.

Nota sobre 10: 7


miércoles, 2 de noviembre de 2016

Tonino Valerii 1934-2016





Resultado de imagen de mi nombre es ninguno

El otro fallecido que quería destacar es un director de spaguettis westerns muy apreciado por los aficionados al género: Tonino Valerii. No gozó nunca del prestigio de los tres Sergios (Leone, del que fue ayudante de dirección, Corbucci y Sollima), pero dejó algunos muy destacados como Los días de la ira, La muerte de un presidente, Una razón para vivir y una para morir y Mi nombre es ninguno. Hizo también algún giallo y alguna película erótica, pero son bastante menos conocidas. Descanse en paz



Bill Nunn 1953-2016




Como siempre que llega el principio de mes, repaso los fallecimientos de gente relacionada con el mundo del cine que me han pasado por alto en las últimas semanas y que creo que son destacables por su trayectoria. Esta vez he encontrado dos, el primero que comento es el del actor Bill Nunn, excelente secundario en muchas películas estadounidenses de las últimas décadas, especialmente destacado en una de las que hizo con Spike Lee, Haz lo que debas, aunque también le hemos podido ver en New Jack City, Sister act o la saga Spider-man. Descanse en paz