jueves, 30 de marzo de 2017

El bar



Si hay alguien que se mueve como pez en el agua en el caos y en el esperpento es Alex de la Iglesia, sus películas pueden ser más logradas (Acción mutante, El día de la bestia, La comunidad) o menos (Perdita Durango, La chispa de la vida), pero siempre son inconfundibles y casi siempre el bilbaino saca petróleo de sus actores. No me parece El bar uno de sus mejores trabajos, pero tampoco el desastre que algunos críticos han dicho (mención aparte merece el crítico Nando Salvà, en su crítica de El periódico ha dado excesivos detalles de la trama, tan pormenorizados en algunas cosas que sobrepasan el spoiler, premio Pico de oro para él).

A lo que iba, no me ha disgustado la película ni mucho menos, pero me parece uno de sus filmes más irregulares. Hay un detalle que me parece que se les ha escapado a muchos críticos, y es que no es la primera vez que Álex de la Iglesia hace un trabajo en un bar, ya hizo una pequeña joya de 11 minutos llamada Mirindas asesinas, de la que creo que toma mucho este cruce entre El ángel exterminador y Los odiosos ocho-Diez negritos (Los pájaros lo veo menos, la escena del bar del filme de Hitchcock me parece muy diferente en puesta en escena y en significado), donde 9 personajes quedan atrapados en un bar sin poder salir a riesgo de perder la vida. El problema es que tras una parte muy brillante en el bar, la segunda en el sótano me parece menos brillante y en exceso alargada, y por ahí creo que flojea el filme. Espléndidos en sus papeles Terele Pávez, Secun de la Rosa y Carmen Machi, muy pasado de rosca aunque el papel lo requiera Jaime Ordóñez y no desentonan dentro de sus limitaciones Mario Casas y Blanca Suárez. Como siempre muy brillante la dirección artística de Arrizabalaga y Biaffra, estupendos títulos de crédito y muy buena banda sonora de Carlos Riera y Joan Valent. Obra menor no despreciable de su director.

Nota sobre 10: 7



domingo, 26 de marzo de 2017

Redención (Southpaw)




Encima de llegar muy tarde (con casi dos años de retraso, se estrenó en el verano de 2015 en USA), le han puesto uno de los títulos más espantosos en España que recuerdo últimamente. No soy mucho de boxeo, pero por lo que he podido averiguar, el término southpaw alude a un boxeador zurdo, lo de Redención es una chorrada repetitiva y redundante por la que merece ir al paro el responsable del desaguisado.

Como dije, ya nadie recordaba Southpaw había quedado olvidada, hasta que alguien con pocos filmes en catálogo como Filmax la sacó del olvido. Podían habérse ahorrado el estreno en mi opinión. Tópico, previsible y mortalmente aburrido melodrama de boxeo sobre boxeador engreido que sufre una tragedia personal y que busca la redención, es una muestra más de que el imprevisible Antoine Fucqua sigue dando actualmente palos de ciego y sigue viviendo de las rentas de Training day. Solo la salvan Jake Gyllenhaal y Forest Whitaker, lo demás es perfectamente olvidable, incluida la banda sonora póstuma de James Horner, casi invisible e indigna del compositor, si es que la pudo acabar.

Nota sobre 10: 3

jueves, 23 de marzo de 2017

Tomás Milián 1933-2017










De tanto aparecer en spaguettis westerns y policíacos italianos, un despistado podría pensar que Tomás Milián era italiano, pero era cubano.  Especializado en tipos duros, su primer spaguetti western fue El precio de un hombre, brilló en sus trabajos con Sergio Sollima y Sergio Corbucci, como  Cara a cara, El halcón y la presa, Corre cuchillo corre, Los cuatro del apocalipsis o  El blanco el amarillo y el negro, para cuando Almería dejó de ser el paraiso del western convertirse en un asiduo del policiaco con títulos como Desafío a la ciudad y Juventud armada y peligrosa. En los últimos años lo pudimos ver en títulos internacionales como JFK, Traffic y La fiesta del chivo. Su última película es un retorno a su personaje más emblemático, Cuchillo, en Keoma rises, filme no sé si acabado antes de fallecer este miércoles. Descanse en paz un icono del cine europeo más popular





miércoles, 22 de marzo de 2017

La bella y la bestia



La nueva versión de Disney de La bella y la bestia acaba en chasco, otro más en la filmografía de Bill Condon, que sigue sin estar a la altura de sus dos primeras películas como director, Dioses y monstruos y Kinsey. Creo que son varios los problemas del filme.

El más importante, la duración. 45 minutos de más respecto al filme de 1991 y no están justificados por un par de canciones nuevas (ojo, no vienen del musical de Broadway, las que eran diferentes en teatro no las han utilizado, y alguna vale más la pena que las nuevas) o por una escena creo que bastante ridícula y prescindible sobre la madre de Bella. El ritmo del filme se resiente mucho de tan exagerado exceso de minutos de más, y el filme se me hace soporífero.

Reparto equivocado, y personaje erróneo. Salvo Kevin Kline y las voces de los personajes animados, el resto no me convence. Emma Watson sigue sin dar bien el salto a la etapa post Harry Potter y me parece que hace una Bella excesivamente sosa y Luke Evans es demasiado "refinado" para hacer de Gastón, no da el tono que requiere el personaje. Luego está lo del personaje gay interpretado por Josh Gad; si no supiese que Bill Condon es homosexual, casí diría que es un personaje escrito por un homófobo, se les ha ido tanto la mano con la pluma que es una caricatura de un homosexual digna de un chiste de Arévalo, no me convence para nada ni como interpretación ni como personaje.

Como musical, es menos convincente que el de 1991, las coreografías están mucho menos conseguidas que la de 1991, especialmente la de Be our guest. Y han acentuado un problema que ya tenía el diseño de producción de la primera, que ya rozaba la cursilería en algunos momentos, aquí ya lo sobrepasa y cae directamente en lo hortera en algún momento.

Se salva la banda sonora por supuesto (Alan Menken y Howard Ashman fueron una gran pareja artística, es una lástima que a Ashman se lo llevara tan pronto el SIDA), los efectos especiales de los objetos y Kevin Kline, pero no es suficiente, no puedo darle el aprobado, me parece una versión fallida del clásico de Disney.

Nota sobre 10: 4



Incierta gloria



Agustí Villaronga vuelve a la Guerra civil con Incierta gloria, y lo hace de la manera incómoda que es habitual en él, sus películas son muy duras y esta no es una excepción. Basada en una novela de Joan Sales, refleja muy bien la tierra de nadie en que se convirtió el frente de Aragón a principios de 1937 hasta las batallas de Belchite y Teruel, no es maniqueo, sin contar spoilers los buenos tienen momentos perversos y los malos momentos redimibles y cuenta con un gran reparto, donde todos están muy bien, empezando por los secundarios Terele Pávez y Fernando Esteso (en uno de sus pocos papeles no cómicos) y acabando con los dos mejores: Nuria Prims borda un gran papel como la Carlana y Oriol Pla es desde ya un muy serio candidato al Goya al mejor actor revelación (Marcel Borràs podría, pero su papel protagonista es menos agradecido. Filme muy recomendable, Villaronga sigue en plena forma, y es más que aconsejable ver la versión bilingüe, dado que los personajes hablan castellano y catalán en una zona de Aragón en que conviven ambos idiomas.

Nota sobre 10: 8





martes, 21 de marzo de 2017

El viajante



El caso de El viajante me recuerda a lo que pasó con El escritor de Polanski, donde muchos obviaron la calidad del filme para decir que le habían premiado por motivos extracinematográficos. Más allá de la que ha liado Donald Trump, el filme iraní de Asghar Farhadi me parece un más que merecido ganador de Oscar, como también lo hubiese sido Toni Erdmann, es un excelente melodrama del que no conviene contar más de la cuenta, sobre un matrimonio de dos actores que mientran ensayan Muerte de un viajante se ven obligados a cambiar de domicilio y se encuentran con la mayor de sus pesadillas. Filme para nada aburrido, espléndidamente interpretado por Shahab Hosseini Taraneh Alidoosti y un tercer actor  clave en el final al que no he encontrado el nombre, y al que quizás le sobren unos minutos en las escenas de los ensayos de Muerte de un viajante, pero me parece un defecto menor en un filme muy recomendable.

Nota sobre 10: 9



Es por tu bien



Con un guión malo es imposible hacer una buena película, y el de Es por tu bien es de los peores que recuerdo del reciente cine español. Sucesión interminable de chistes malos y situaciones mil veces vistas sobre cuñaos y chicas con novios no muy presentables que ya eran viejas en la época de las revistas de los años 20, con dirección torpe y unos actores que intentan salvar la papeleta como pueden (lo más decente de la película es el trío protagonista y Miki Esparbé). No es que esperase mucho de Carlos Therón, el director de Fuga de cerebros 2, pero sí esperaba más de Manuel Burque, buen actor secundario, pero parece que no tan buen guionista. Película muy mala, que sea una de las películas más taquilleras actualmente en cartelera es algo que se escapa a mi comprensión.

Nota sobre 10: 1



lunes, 20 de marzo de 2017

Antoni Llorens 1940-2017
































Basta con ver todas las fotos que he puesto de las peliculas que distribuyó el ayer fallecido Antoni Llorens y Lauren films (y no he sido exhaustivo, he evitado repetir  filmes de un mismo director, porque no terminaría en horas) para darse cuenta de la importancia de su figura en la historia de la distribución en España. Llorens comenzó en CB films, empresa que distribuía la mayor parte del archivo de United Artists, para después independizarse y crear Lauren Films. Tras empezar con las películas de Jackie Chan, consiguió hacerse primero con los derechos en España de las películas de Orion y Miramax, y también produjo varias películas de Almodóvar (La ley del deseo, Mujeres al borde de un ataque de nervios, Átame). Como resultado, Lauren films fue en los 80, 90 y principios del siglo XXI probablemente la distribuidora no major más importante de España, e incluso se puso a crear salas cinematográficas o reconvertir antiguos cines de barrio en multisalas.

Todo fue aparentemente sobre ruedas hasta 2004. Lauren entra en crisis económica a la vez que pierde el contrato con Miramax, y a partir de ahí se suceden un par de concurso de acreedores en 2004 y 2009, el consiguiente cierre de sus salas en Barcelona (algunas fuentes me dicen que siguen algunas salas fuera de la ciudad, pero yo no las encuentro, salvo que hayan cambiado de nombre) y la práctica desaparición de la distribuidora de películas actualmente, hace tiempo que no veo su logotipo en ninguna película. Triste final para un gran hombre de cine, descanse en paz.