El Oscar a mejor banda sonora fue para Mary Poppins, de la que ya hablé en la historia de las canciones ganadoras de Oscar. Así que hablaré de una de las bandas sonoras más famosas de la historia: La pantera rosa.
El filme de Blake Edwards era una muy divertida comedia de ladrones de guante blanco que planean el robo de un diamante llamado la Pantera rosa. Estaba protagonizada por David Niven, Capucine y Robert Wagner, pero quienes se llevaron la fama e iniciaron una larga saga fueron dos secundarios inesperados.
El primero, el felino que protagonizaba los formidables títulos de crédito. La animación de David H de Patie y Fritz Feleng era tan divertida que el personaje animadp protagonista se convirtió en un icono del cine y la televisión y tuvo durante un buen tiempo una famosa serie de televisión. Tiene hasta un pastelito que creo todavía se vende.
Y por encima de los ladrones, quien destacó fue el Inspector Clouseau, un policía torpe, descuidado y que no daba una en el primer filme (inolvidable en el final en el juicio). El papel iba a hacerlo Peter Ustinov, pero finalmente se lo llevó al huerto Peter Sellers.
Tuvo tanto éxito que Edwards adaptó para el actor una obra de teatro francesa llamada A shot in the dark. Edwards la convirtió en una parodia de las novelas de Agatha Christie (muy bueno quién es el asesino, parodiando una de sus más famosas novelas), dio todo el protagonismo a Sellers, y lo rodeó de varios secundarios memorables, como el jefe de policía que pierde completamente el juicio por culpa de Clouseau y el mayordomo karateka que le pone trampas al inspector por orden suya. El resultado: una película todavía mejor y una de las mejores comedias de la historia del cine, aquí titulada El nuevo caso del Inspector Clouseau.
Y que es la que marca el estilo del resto de la saga. Con mejores o peores resultados artísticos, todas seguirán el esquema de El nuevo caso del Inspector Clouseau.
La primera, sin Edwards ni Sellers. El rey del peligro la protagoniza Alan Arkin, gran actor pero que no llega a los niveles de Sellers en una película floja.
Después tres películas y el comienzo de otra. Edwards atraviesa un bache artístico y comercial y retoma el personaje con El regreso de la Pantera Rosa, a la que le seguirán La Pantera Rosa ataca de nuevo y La venganza de la Pantera Rosa. Más o menos logradas, son sumamente entretenidas y el talento cómico de Sellers y la maestría en el gag de Edwards siempre logran algún momento muy bueno.
Al poco de empezar la siguiente. Peter Sellers muere de un infarto. Mientras encuentra un sustituto, Edwards acaba la película con lo poco que pudo rodar y descartes de otras entregas. El resultado como es de esperar no funciona.
Funcionan menos las últimas ya de Edwards. El olvidable Ted Wass es un fiasco en La maldición de la Pantera Rosa, y lo único salvable es un gag genial con el Inspector Clouseau interpretado por Roger Moore. Lo vuelve a intentar con Roberto Benigni en El hijo de la Pantera Rosa y el resultado es todavía peor, es el peor filme de la carrera de Blake Edwards y su triste última película, no merecía tal final uno de los mejores directores de comedia de la historia del cine.
Ya sin Edwards, Steve intenta dos reboots del personaje, pero las películas resultan mediocres.
Toda la saga hasta El hijo de la Pantera Rosa tuvo música compuesta por Henry Mancini salvo El rey del peligro Su tema principal compuesto en 1963 es uno de los mejores de Mancini, aunque no está presente en El nuevo caso del Inspector Clouseau, y es uno de los más icónicos de la historia del cine.
Memorable partitura a ritmo de jazz que no ganó el Oscar al ser el año de Mary Poppins, pero que también lo merecía.
Las otras nominadas, Becket (Laurence Rosrnthal), La caida del imperio romano (Dimitri Tiomkin) y Canción de cuna para un cadáver (Frank DeVol)
Y que es la que marca el estilo del resto de la saga. Con mejores o peores resultados artísticos, todas seguirán el esquema de El nuevo caso del Inspector Clouseau.
La primera, sin Edwards ni Sellers. El rey del peligro la protagoniza Alan Arkin, gran actor pero que no llega a los niveles de Sellers en una película floja.
Después tres películas y el comienzo de otra. Edwards atraviesa un bache artístico y comercial y retoma el personaje con El regreso de la Pantera Rosa, a la que le seguirán La Pantera Rosa ataca de nuevo y La venganza de la Pantera Rosa. Más o menos logradas, son sumamente entretenidas y el talento cómico de Sellers y la maestría en el gag de Edwards siempre logran algún momento muy bueno.
Al poco de empezar la siguiente. Peter Sellers muere de un infarto. Mientras encuentra un sustituto, Edwards acaba la película con lo poco que pudo rodar y descartes de otras entregas. El resultado como es de esperar no funciona.
Funcionan menos las últimas ya de Edwards. El olvidable Ted Wass es un fiasco en La maldición de la Pantera Rosa, y lo único salvable es un gag genial con el Inspector Clouseau interpretado por Roger Moore. Lo vuelve a intentar con Roberto Benigni en El hijo de la Pantera Rosa y el resultado es todavía peor, es el peor filme de la carrera de Blake Edwards y su triste última película, no merecía tal final uno de los mejores directores de comedia de la historia del cine.
Ya sin Edwards, Steve intenta dos reboots del personaje, pero las películas resultan mediocres.
Toda la saga hasta El hijo de la Pantera Rosa tuvo música compuesta por Henry Mancini salvo El rey del peligro Su tema principal compuesto en 1963 es uno de los mejores de Mancini, aunque no está presente en El nuevo caso del Inspector Clouseau, y es uno de los más icónicos de la historia del cine.
Memorable partitura a ritmo de jazz que no ganó el Oscar al ser el año de Mary Poppins, pero que también lo merecía.
Las otras nominadas, Becket (Laurence Rosrnthal), La caida del imperio romano (Dimitri Tiomkin) y Canción de cuna para un cadáver (Frank DeVol)
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