Ya que hoy viernes comienzan los Juegos Olímpicos de Tokio, he pensado en poner una película deportiva, y la he puesto más por el interés de la banda sonora que por el de la película, que la volví a ver hace pocos meses en Phenomena, que me dejó frío en su estreno y que creo que ha envenjecido mal salvo en la banda sonora y en parte en las interpretaciones: Hoosiers, más que ídolos
Si en este milenio, el género deportivo estadounidense se ha convertido en tópico, con historias fotocopiadas muchas dicen que basadas en hechos reales, sobre equipos de medio pelo que de forma milagrosa resucitan gracias a un entrenador con más o menos mala leche y que siempre ganan el trofeo en la última canasta, carrera o touchdown, considero a Hoosiers la precursora, o no recuerdo películas anteriores con tantos tópicos o eran más disimulados. Cuando la vi hace poco me aburrí como una ostra de tanto tópico que veía, y solo salvaba las interpretaciones de Gene Hackman y Dennis Hopper, y creo que ambos han tenido días mejores. La dirigió el estadounidense David Anspaugh, proveniente de la televisión (Miami Vice, Canción de Hill Street), el resto de su filmografía me parece insignificante, las que he visto las he olvidado rápidamente.
Lo mejor es la banda sonora. Reconozco que como casi siempre Jerry Goldsmith hace muy bien su trabajo, y el tema principal es magnífico, pero no es una de mis bandas sonoras preferidas del maestro, la insignificancia del resto de la película me hace tener menos aprecio que otras obras suyas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario