Tony Scott siempre cargó con el sambenito de estar considerado peor director que su hermano Ridley, siempre le tildaron de comercial, hollywoodiense y de tener menos talento. Fue un director irregular, Superdetective en Hollywood II, Fanático, Domino e Imparable son flojitas, y Top gun y El último boy scout entre otras no pasan de correctas, pero Tony me pareció un realizador mucho más que respetable en El ansia, Revenge, Amor a quemarropa, Enemigo público, El fuego de la venganza y la que hoy ocupa el artículo: Marea roja.
Hay que reconocer que Marea roja es sobre todo una película de productores. Don Simpson y Jerry Bruckheimer eran imparables en la taquilla en esos años con Dos policías rebeldes y las posteriores La roca y Armagedón, y esta es una clásica producción de ellos, sobre un submarino nuclear que se queda incomunicado durante una crisis política en Rusia (la posguerra fría seguía dando mucho juego), y el comandante del submarino y su segundo que se enfrentan sobre atacar o no. Scott dio lo mejor de si manteniendo la tensión y la claustrofobia en todo momento, logrando grandes interpretaciones de Gene Hackman y Denzel Washington, bien secundados por actores poco conocidos entonces como Viggo Mortensen y James Gandolfini y un gran secundario como George Dzundza). Se rumoreó que Tarantino había retocado partes del guión, desde luego el diálogo sobre los caballos blancos y negros parece muy de su estilo.
Tiene una gran banda sonora de Hans Zimmer. Es del estilo marcial muy característico de los filmes de Simpson y Bruckheimer, pero tiene una enorme fuerza, es una de mis bandas sonoras favoritas del compositor alemán,
No hay comentarios:
Publicar un comentario