Cinco años ha tardado en llegar la secuela del remake del clásico de Charles Bronson Friamente, sin motivos personales (para mí, la mejor película que conozco de Michael Winner con permiso de La centinela y Death wish), cosa rara en los tiempos que corren (Millenium será la heredera de Cannon, pero estos tardaban menos). Nuevamente protagonizada por Jason Sthatam, es otra sucesión de mamporros sin mucho sentido, escenas de acción menos espectaculares de lo que aparenta (lo mejor, el numerito de la piscina en el rascacielos, pero ya la han mostrado casi entera en el trailer), una Jessica Alba cuya función es poco menos que la de un florero, un Tommy Lee Jones cuyo talento merecen películas mejores y una Michelle Yeoh que sale demasiado poco. Entretiene si se es poco exigente, y se beneficia del carisma de Statham, pero poco más, no llega al aprobado.
Nota sobre 10:4
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