Lo de hacer una crítica de una película que bebe especialmente de Agatha Chistie (yo no veo a Brian de Palma y Dario Argento en la película, le hace falta a Oriol Paulo un sentido del exceso y el humor negro del que van sobrados los dos maestros) tiene sus riesgos porque puedes caer en el spoiler involuntariamente, haré lo que pueda para no comentar demasiado de este pseudoremake no confeso de Muerte de un ciclista en clave de whodunit (novela policiaca enigma).
Y lo que puedo es que el homenaje es bastante malo. Paulo me temo que no es un buen guionista, por rebuscado y alambicado que intente serlo. Si lo que quería era homenajear los enigmas de habitación cerrada, le ha salido el tiro por la culata, porque le falla la intriga y le falta la autoironía, no es lo mismo este enigma sobre mujer muerta en habitación cerrada junto al amante que las dos obras más famosas de Christie sobre el tema, El asesinato de Roger Akroyd (su obra maestra junto con 10 negritos y Cianuro espumoso) y el relato corto Problema en el mar, mucho más divertidas y más locas que esta vulgar trama tremendamente previsible, cualquiera con dos dedos de frente puede imaginar qué es lo que ha pasado.
Y también Paulo es tremendamente descuidado, lo peor que le puede pasar a un jugador con cartas marcadas es que le pillen por trabajar con cartas mal hechas. El director se reserva un giro final que debería ser sorprendente, pero se le pilla el farol por una caracterización horrible de determinado personaje (recomiendo que miréis a todos los personajes a los ojos, no hace falta ser un excelente fisonomista para ver que algo chirría en alguno de ellos). Hay que ser muy bueno para hacer un final sorpresa y no ser descubierto, y a Paulo se le ve rápido, es un fallo terrible en este tipo de películas- Por todo lo que comento, la película no hay por donde pillarla, solo se salva la buena banda sonora de Fernando Velázquez y el esforzado trabajo actoral de algunos intérpretes para sacar adelante sus no demasiado buenos personajes, especialmente las dos actrices (Mario Casas sigue sin dar la talla), lo demás es para olvidar.
Nota sobre 10: 1
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