Tengo un vago recuerdo de la primera versión que sobre la vida de los gemelos Kray dirigió Peter Medak, el director de Al final de la escalera, así que no puedo compararla con esta versión que el imprevisible Brian Helgeland ha hecho sobre el tema. Helgeland siempre ha sido capaz de lo bueno, de lo malo y de lo peor, y aquí ha hecho una buena farsa negra sobre dos gangsters que se convirtieron en lo más cool del Londres pop. No es perfecta, le sobra metraje y no tiene bien equilibrado el tono cómico con el dramático de algunos pasajes, pero tiene una doble excelente interpretación del camaleónico Tom Hardy, por momentos parece que realmente haya dos actores diferentes interpretando a los gemelos. Filme más que aceptable.
Nota sobre 10: 6
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