jueves, 14 de mayo de 2020

Oscar 1993: Streets of Philadelphia

Que la actual epidemia de coronavirus está siendo terrible no debe hacernos olvidar que otras enfermedades infecciosas son igual de terribles o más. Según datos oficiales de 2018, el SIDA mató  ese año en el mundo a 770.000 personas, la tuberculosis 1,5 millones, la malaria 405 mil... Me sorprende más que la OMS tenga que avisar de que el COVID-19 puede no irse, en general y salvo pocas excepciones las enfermedades infecciosas suelen quedarse, no desaparecen de repente. Esperemos que esta pandemia remita pronto.

El SIDA desgraciadamente si se ha quedado, que esté controlado en muchos paises hace olvidar a muchos que sigue siendo terrible en muchos paises, especialmente de África. Quedan muy lejos los tiempos en que ocupaba portadas, cuando surgió de repente a principios de los 80 y algunos políticos  ultraconservadores no le quisieron hacer caso al pensar que era "solo un problema de la comunidad gay".

La lista de fallecidos dentro del mundo del espectáculo es larga, y no por conocida hay que olvidarla: Rock Hudson, Freddie Mercury, Anthony Perkins, Rudolf Nureyev, Brad Davis, Howard Ashman, Néstor Almendros, Emile Ardolino, John Holmes, Derek Jarman, Tony Richardson... Una buena cantidad de talentos que se fueron demasiado pronto.

Hollywood, al igual que con la Guerra de Vietnam, tardó muchos años en tratar el tema en sus películas, los estudios en la Era Reagan no estaban precisamente por la labor de hablar de una epidemia que consideraban poco menos que una maldición hacia la comunidad gay. Tuvieron que llegar primero películas europeas como Los amigos de Peter o películas que no eran de majors como Compañeros inseparables.

La primera major en atreverse a hablar del SIDA es Columbia en 1993 con Philadelphia. No es de lo mejor de Jonathan Demme, pero nadie niega su valentía en ese momento, y tiene como mayores bazas la interpretación de su protagonista y la banda sonora.

Como suele ocurrir, el excelente actor que es Tom Hanks no era tomado en serio siendo un actor cómico. Ya le habían tenido en cuenta con Big, pero seguián pensando que era un graciosete más. Philadelphia es clave en su carrera, gana su primer Oscar y se le empieza a respetar, con algunos altibajos no ha perdido ni el respeto ni el status de estrella. En la película está excelente.

La banda sonora es muy buena. Neil Young también compuso un excelente tema con el título de la película también nominado al Oscar, pero el que se llevó  los honores con todo merecimiento fue Bruce Springsteen con Streets of Philadelphia. La canción en los títulos de crédito es sin duda una de las mejores de los Oscars de los 90-

Entre las nominadas, una canción de otra película de Tom Hanks, Algo para recordar: A wink and a smile. Janet Jackson pasó más desapercibida con Again, de Justicia poética.




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