lunes, 4 de mayo de 2020

Oscar 1983: What a feeling

En 1983 dos películas copaban las nominaciones al Oscar a la mejor canción: Flasdance (What a feeling, Maniac) y Yentl (Papa, can you hear me?, The way he makes me feel), completando el quinteto Over you de la película Tender mercies. La decisión de la Academia fue salomónica: Oscar a la mejor banda sonora adaptada para Yentl y Oscar a la mejor canción para Flashdance.

En concreto para What a feeling, aunque Maniac no hubiese sido tampoco una mala ganadora, eran dos temas muy potentes, hoy convertidos en clásicos. La película fue el primer éxito de varios personajes de Hollywood que triunfarían en años posteriores.

Los productores Jerry Bruckheimer y Don Simpson fue la primera vez que trabajaron juntos, tras participar por separado Simpson en Los locos de Cannonball y Bruckheimer en American gigolo. Juntos formaron una de las productoras más exitosas de los 80 y 90, con títulos taquilleros como Superdetective en Hollywood, Top gun, Bad boys o La roca; durante el rodaje de esta, Simpson fallece por sobredosis, siguiendo Bruckheimer teniendo éxitos en solitario como Piratas del Caribe y algún fracaso sonado como El llanero solitario y la reciente Géminis-

Adrian Lyne formaba parte de los cinco directores británicos que provenientes del mundo de la publicidad triunfaron a partir de finales de los 70: los hermanos Scott, Alan Parker y Hugh Hudson. Se especializó en películas de corte erótico de gran éxito como 9 semanas y media, Atracción, fatal, Una proposición indecente o Lolita. Salvo en contadas ocasiones (La escalera de Jacob), ha sido más del agrado del público que de la crítica. Llevaba tiempo sin dirigir, pero recientemente ha vuelto con Deep water, pendiente de estreno.

El guionista Joe Eszterhas debuta prácticamente con Flashdance, tras colaborar con Stallone y Norman Jewison en FIST. Se convirtió en uno de los guionistas mejor pagados de Hollywood con thrillers como El sendero de la traición, La caja de música o Instinto básico, pero ha desaparecido del mapa tras desastres en taquilla y/o en crítica como Showgirls e Instinto básico 2.

Y todos juntos logran el éxito sorpresa de Flashdance. Llegó en el momento adecuado, en 1983 se estaba  consolidando el videoclip en la industria discográfica y el filme siendo correcto es poco más que un videoclip de 90 minutos sobre una chica que sueña con ser bailarina mientras trabaja en la industria del acero. Lanzó brevemente al estrellato a Jennifer Beals (aunque no bailaba, lo hacía una doble) y convirtió en un clásico a la canción ganadora del Oscar, compuesta por Giorgio Moroder y Keith Forsey, e interpretada por Irene Cara.

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