Tres anuncios en las afueras

Tres anuncios en las afueras fue la relativa sorpresa en los Globos de Oro (no para mí, yo predije que podía ganar cualquier salvo Dunkerque, y además era la segunda película con más nominaciones) y se ha convertido de repente en una de las favoritas al Oscar, creo que lo merece.

Intentaré no hacer spoilers sobre el filme, salvo alguna cosa que tengo que decir sobre el discutido final (que haré al final). Martin McDonagh es un reputado autor teatral (recomiendo si podéis ver en algún teatro esa obra cumbre del humor negro y del teatro delabsurdo que es La calavera de Connemara, bastante diferente que estos Tres anuncios, aunque tenga puntos en común) al que se despachaba como un sucedáneo de Tarantino, cuando tiene poco de ver, salvo el uso del humor negro en las tramas policiales; ya apuntaba muy alto en Escondidos en Brujas, y algo menos en Siete psicópatas, mejor guión que película. Pues ya no apunta, ya ha llegado muy alto.

El guión, partiendo del macguffin de los tres anuncios, es muy brillante, cómico cuando tiene que serlo (del humor más negro que recuerdo) y trágico cuano hace falta enrevesado y a la vez claro, donde no me parece sobrar ni una coma, ni un solo personaje por pequeño que sea, y que no da todo mascado explicándolo sin embargo lo suficiente. Le ayudan tres actores en estado de gracia: Frances McDormand está soberbia, transmite toda la furia por no poder hacer nada por descubrir al asesino, y a la vez hace que sintamos compasión y cariño por ella. Sam Rockwell tiene un personaje que es un bombón y una bomba al mismo tiempo,  se podía haber pasado tres pueblos por histrionismo  y sin embargo acabamos admirando cómo lo interpreta. Finalmente Woody Harrelson creo que tiene el personaje más complicado, aparentemente plano, pero que en realidad es el único cuerdo en un pueblo de locos, la idea de las tres cartas que manda a tres personajes es una idea genial.

Por todo ello, y lo que no quiero contar, me parece un filme magnífico, la confirmación de que McDonagh es un gran cineasta aparte de un excelente escritor. Y OJO SPOILER si algún espectador, y algún crítico despistado como Carlos Boyero, sigue dándole vueltas a si el crimen acaba resuelto o no en el estupendo final, le recomiendo una cosa: que recuerde en qué momento de la película vio por primera vez al sospechoso del bar, y qué hizo en esa escena anterior; si lo pilla, comprobará que es el asesino, es absurdo pensar en una trama tan milimétrica qie alguien  amenace porque sí a alguien que no conoce, carecería de lógica narrativa, y no es el caso.

Nota sobre 10: 9