No guardaba buen recuerdo de la única película que había visto de Luca Guadagnino (Cegados por el sol), y mi opinión sobre el director (aquí guionista) James Ivory está llena de altibajos (de lo mejor, Lo que queda del día, a lo peor, Le divorce, pasando por lo que creo sobrevalorado, Una habitación con vistas), así que tenía ciertas reservas ante las buenas críticas que estaba leyendo sobre Call me by your name (¿tanto costaba traducirla como Llámame por tu nombre? Sigo sin entender a qué juegan los distribuidores españoles con los títulos).
Tras verla, mis reservas se han evaporado. Ivory ha hecho un gran guión a partir de una novela que por lo que dicen difícil de llevar al cine por correr el riesgo de abusar de la voz en off, y Guadagnino ha sabido llevar perfectamente a la pantalla la historia del descubrimiento de la bisexualidad del personaje principal, con la historia de su romance con una chica y con un hombre mayor que él (algunos como James Woods la han acusado de apología de la pederastia, yo no lo veo tan claro rozando el chico la mayoría de edad, pero respeto la opinión de Woods y por eso la menciono aquí). Excelente trabajo de fotografía de Sayombhu Mukdeeprom, buen trabajo del Armie Hammer (aunque esté mucho mejor que en otros filmes suyos, la competencia para el Oscar al actor secundario era dura, creo que está bien no nominarlo) y superlativa interpretación de Michael Stuhlbarg y de la gran revelación del filme, Timothée Chalamet. Le sobra alguna salida de tono como lo del melocotón que no me acaba de convencer, pero me parece un filme muy notable. Las crónicas comentan que se presentó en Sundance el año pasado, pero deben haber retocado como mínimo los títulos de crédito, el filme está dedicado a la memoria de Bill Paxton, fallecido después del Festival creado por Robert Redford
Nota sobre 10: 8
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