Thi Mai, rumbo a Vietnam, es el quinto largometraje de Patricia Ferreira, y para mí su peor película. La historia de tres mujeres intentando conseguir para una de ellas la adopción de su futura nieta en Vietnam, tenía posibilidades, pero opta casi siempre por la opción más inverosímil o más torpe para contar la historia, concluyendo con un final absurdo y ridículo. No ayuda tampoco que Dani Rovira vuelva a hacer de sí mismo en un papel delirante, o que cometan el error de poner como croupier en Vietnam a un conocido actor catalán de origen surcoreano, Alberto Jo Lee (o no han sido capaces de encontrar actores en Vietnam, o no cuelan las localizaciones interiores si están hechas en España). Se salva el trío protagonista y el actor francés Eric Nguyen, pero el filme es decepcionante y aburrido, Ferreira ha demostrado en otras ocasiones más talento.
Nota sobre 10: 3
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