Antes de que se hablase del término de blockbuster estadounidense, el director canadiense Arthur Hiller, fallecido ayer, se puede considerar un pionero. Autor de grandes éxitos (y algún fracaso comercial muy sonado), generalmente en el terreno de la comedia, Hiller no pasó de ser un hábil artesano, pero creo que en general sus películas no son tan malas como se dijo en su momento. Deja dos que a mí me gustan mucho, La americanización de Emily y El expreso de Chicago, varias comedias muy populares en su momento como Prométele cualquier cosa, Los encantos de la gran ciudad, Los suegros y No me chilles que no te veo, una muy premiada en su momento como es Anatomía de un hospital, y dos fracasos comerciales notorios como El hombre de la Mancha y Autor autor, terminando su carrera en 2006 con una película con Bon jovi, Pucked. Pero popularmente será recordado por el mayor éxito de su carrera, el dramón romántico Love story, cuya para mí discutible banda sonora es ya un clásico. Descanse en paz.
Podía haber acompañado este homenaje con la banda sonora de Love story, pero personalmente no puedo con el compositor Francis Lai (su dabadabada de Un hombre y una mujer me produce sarpullidos, y aunque no odio tanto la de Love story, me parece sobrevalorada). Por lo tanto, pondré otro clásico, El sueño imposible de El hombre de La Mancha en la voz de Peter O'Toole:
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