Agáchate, maldito fue el último western de Sergio Leone, sin ser un fracaso ni mucho menos no tuvo la misma acogida que los anteriores filmes del director italiano, el spaguetti western empezaba a dar muestras de agotamiento y el público había comenzado a tener más gusto por los westerns cómicos de Terence Hill y Bud Spencer. Aún estando un escalón por debajo de la Trilogía del dólar y de Hasta que llegó su hora, a mí me parece un muy buen western sobre un bandido mexicano y un exmiembro del IRA que se ven envueltos en la Revolución mexicana, con dos grandes actores como Rod Steiger y James Coburn y con Romolo Valli en un papel muy importante. Leone solo pensaba producirla y tanteó también a Peter Bodaganovich y Sam Peckinpah.
El amigo de la infancia de Leone siguió en la línea habitual de sus trabajos conjuntos, la genialidad. Es una maravillosa banda en la que Morricone osciló entre lo grotesco y lo triste, perfecto para lo que cuenta la película, que comienza de manera cómica y acaba de manera trágica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario