El principio es tan desconcertante, tan "marciano" como su personaje central, un email de un abogado que dice y hace algo que no es lo esperable de alguien en su profesión. El resto de la película creo que va por los mismos derroteros: filme irregular (en parte la trama y sobretodo el desenlace no están a la altura), atípico (esto no es la clásica película de santo abogado en los tribunales, solo hay un juicio y pequeño, y el personaje tiene sus partes oscuras y encima se equivoca y no sabe estar en un tribunal) y sobretodo con un actor excepcional como Denzel Washington, bien secundado por Colin Farrell; el actor afroamericano hace creible un personaje tan marciano como su vestimenta y su look. Como he dicho, la trama no acaba de estar bien urdida, es un tanto confusa y concluye con un final previsible, hace que una película que podía ser mejor se quede en notable.
Nota sobre 10: 7
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