Cuando ví en 2012 la obra de teatro Toc toc, no acabé de entender su éxito en todo el mundo, me parecía una obra plana, que estiraba lo indecible una situación única que no daba para tanto, que tenía un final sorpresa muy predecible y a la que solo salvaba un muy buen reparto. Me sorprendió la decisión de convertirla en película, puesto que tenía una estructura muy teatral que no siempre funciona en el cine, y no me he equivocado, el filme es un fiasco. Los problemas se han agudizado, porque creo que Vicente Villanueva no ha encontrado el ritmo adecuado, el filme ha perdido la relativa gracia que tenía la obra teatral, ha cometido un error de casting en el final sorpresa (no lo diré para quien no no haya visto ni la obra ni la película, pero es difícil sorprender si tiras de tópico de películas españolas sobre psiquiatras y pacientes) y se saca de la manga escenas fuera de la consulta y un final en los títulos de crédito con cameos que no aportan nada relevante. Ni siquiera el buen reparto encabezado por Paco León, Óscar Martínez, Rosy de Palma, Alexandra Jiménez y Adrián Lastra salva el desaguisado, es una película muy floja.
Nota sobre 10: 2
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