Antonio Isasi Isasmendi era uno de los grandes directores del cine español, aunque no del todo valorado en su justa medida por muchos. Acostumbrados a que nuestro cine no diese excesivos directores de género más allá del cine negro de los 50 (donde debutó como guionista con un título clave como Apartado de correos 101) el western o el terror (y estos dos salvo pocas excepciones con poca intención internacional), Isasi Isasmendi fue un caso muy raro en el cine del franquismo. Un director que hacía productos comerciales muy bien hechos y tremendamente entretenidos con estrellas internacionales como Karl Malden, Lee J. Cobb o Jack Palance, filmes que además cosecharon éxito fuera de nuestro país. Así, tras las primeras y menos conocidas Relato policíaco, Diego Corrientes, Sentencia contra una mujer o La mentira tiene cabellos rojos, llegaron sus filmes más conocidos: Estambul 65, Las Vegas 500 millones, Un verano para matar y El perro, acabando con El aire de un crimen. Descanse en paz uno de los directores más infravalorados de nuestro cine.
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