Godzila, el monstruo más famoso creado por el cine japonés, no ha tenido demasiado suerte en mi opinión en los sucesivos remakes o reboots que ha tenido fuera de su país, todos los que conozco oscilan entre lo aburrido, lo mediocre y lo horrible.
El Godzila de Roland Emmerich siempre me ha parecido lamentable, nada de extrañar teniendo en cuenta lo que "aprecio" al director germano. Se equivocó olvidándose del diseño original de la criatura y convirtiéndolo en un sosias de los dinosaurios de Parque jurásico, y convirtió el clásico en una película de humor muy tontorrón y muy mediocre a pesar de tener en el reparto a Matthew Broderick y Jean Reno. Sin ser un desastre en taquilla, no recaudó lo que se esperaba, así que no continuaron las secuelas que anunciaban su escena final.
Lo único que me gusta es la banda sonora. Como en anteriores trabajos con Emmerich, David Arnold hizo un excelente trabajo, lo mejor de lejos de una película olvidable.
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