Quiero comerte tu páncreas es desde luego el título de película más delirante en lo que llevamos de año, título justificado por lo que se explica en el filme y que aquí no comentaré para no hacer spoiler (aunque el spoiler más gordo ya lo hace el filme, la película empieza por una escena que ya explica parte del final).
Dejando el título aparte, el filme me parece un recomendable anime, un Love story nipón en la linea de anime romántico para adolescentes del tipo Silent voice o Your name. No es perfecto, la animación es mejorable, tiene algunas caidas de interés durante el filme y se resiente de un personaje masculino que resulta muy soso en comparación con los dos personajes femeninos principales, pero el director maneja con soltura el melodrama y la historia me parece sólida aún sabiendo cómo va acabar. No perderse la escena poscréditos, no es ni una broma ni un añadido, es el auténtico final de la película, diferente de lo que se ha visto antes de los créditos.
Nota sobre 10: 7
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