El caso de la distribución en España de las dos películas de John Wick roza el surrealismo: primera película no estrenada en España (ignoro si por desidia de las distribuidoras o por otra causa), la compra una empresa de VOD que la estrena en Internet (no sé ni siquiera si está comercializada en DVD, la busqué el otro día y no la encontré), se convierte en película de culto y entonces sí deciden estrenar la secuela. Con gente como esta al frente de la distribución, no me extraña que la gente pase de ir al cine, y que un proyecto como Phenomena que sí respeta al máximo al espectador tenga éxito.
Y creo que las dos película no merecían ese trato. La primera era una brillante película de acción muy estilizada y alejada de la manera de hacer cine de acción actual, y la segunda sigue su brillantez. Un ejercicio de acción brillante y desmadrado hasta el paroxismo muy inspirado en el cine de Hong . Kong, con algunas de las escenas mejor rodadas actualmente del género (la del metro y la sala de los espejos), un uso de la fotografía excelente en las escenas de una decadente Roma, alguna idea tomada de la primera entrega muy imaginativa como la del hotel-refugio y un reparto muy adecuado: a Keanu Reeves no le vamos a pedir que gane un Oscar y que sea el actor más expresivo, pero tiene un carisma a prueba de balas y como héroe de acción suele cumplir si tiene alguien competente tras las cámaras; le acompañan muy bien Common, Laurence Fishburne e Ian Mcshane, no tanto el villano, el actor italiano Riccardo Scamarcio proveniente de las comedias románticas que está bastante pasado de rosca. Muy recomendable para los amantes del cine de acción, si se hace una previsible tercera película espero que no vuelvan a las andadas con la mala distribución.
Nota sobre 10: 8
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