Tras el estreno de Conan, la serie Z italiana no tardó mucho en copiarla, ya tenían experiencia Antonio Margueritti y demás especialistas en subproductos de la época en peplum, y no andaban tan lejos Hércules o Maciste de Conan. Durante los años siguientes proliferaron como una plaga los Conan italianos, tienen su encanto como delirante copia, pero han sido justamente olvidados.
El primero y más conocido fue Ator. Dirigido por el especialista en subproductos y películas eróticas Joe D'Amato (con el pseudónimo David Hills) presentaba al héroe destinado destinado a destruir la dinastía del Arcano. Contrataron para dar el pego a un cachas estadounidense llamado Miles O'Keefe, cuya unica película era la "inolvidable" versión de Tarzán protagonizada por Bo Derek, y lo rodearon de un actor mediocre venido a menos como Edmund Purdom y Laura Gemser (Emmanuelle negra). El resultado fue risible, pero sorprendentemente tuvo un cierto éxito, dio lugar a alguna secuela.
De la banda sonora se encargó Carlo Maria Cordio, dentro del horror es lo más respetable.
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