Antes de consagrarse entre la crítica seria con El fugitivo, Andrew Davis ya se había hecho un nombre entre los amantes del cine de acción haciendo debutar al bueno de Steven Seagal con la aceptable Por encima de la ley y ofreciéndole su mejor película como es Alerta máxima. Y le dio a Chuck Norris una de sus mejores y más dignas películas: Código de silencio.
En ella, mi tocayo Carlos Ray Norris sigue tan expresivo como siempre, lo suyo es patear y dar hostias al personal y no recitar Hamlet, pero la película es un competente trhiller sobre un policía que trata de averiguar quién ha asesinado a dos compañeros que intentaban infiltrarse en una red de traficantes de cocaína. Destaca por el buen ritmo que ya mostraba Davis en sus principios y por un estupendo villano interpretado por el gran Henry Silva. Parece ser que en un principio iba a protagonizarla Clint Eastwood, pero optaron por Norris,
De la banda sonora se encargó David Michael Frank, compositor de varias películas de Norris y Seagal. A mí me parece más que buena, tiene un potente y ochentero tema principal.
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