sábado, 3 de octubre de 2020

El juicio de los 7 de Chicago

 



El juicio de los 8 de Chicago, convertido en el juicio de los 7 de Chicago (por qué pasaron de 8 a 7 mejor no comentarlo para quien no conozca el caso, la grotesca y brutal escena es real y prefiero no hacer spoiler) sigue siendo uno de los juicios más sonados de la historia de EEUU. donde los dirigentes de la manifestación en contra de la Convención Demócrata de 1968 fueron juzgados por los enfrentamientos con la policía, y mal juzgados por un juez que no demostraba ser precisamente imparcial. Desgraciadamente, el tema sigue vigente en todas sus vertientes.

La película iba a ponerle un 8, pero no puedo por la escena final. Aaron Sorkin director demuestra que ha mejorado respecto a su primer interesante Molly's game. Domina mejor el ritmo, la película se sigue con interés y tiene excelentes interpretaciones del reparto, especialmente Mark Rylance, Frank Langella y un sorprendente Sasha Baron Cohen, el mejor de la película, ofrece un registro muy alejado de su habitual tono bufo y funciona perfectamente como Pepito Grillo de la película

Pero Aaron Sorkin guionista se pasa de listo en la escena final. Ojalá me equivoque, pero me da la impresión de que se ha inventado la escena final, he buscado en varias fuentes a ver si encontraba alguna referencia a esos minutos finales y no la he encontrado, me extraña mucho habiendo sido Tom Hayden un político muy conocido que no se mencione en ningún sitio ese final de juicio. Viendo justo después El show de Truman en la misma sala de Phenomena, me recuerda todavía más al final de una de las películas más famosas de Peter Weir, y el final de El juicio de los 7 de Chicago me resulta aún más falso y hollywoodiense. Espero equivocarme y que realmente ocurriese así, pero mientras no se demuestre lo contrario, me parece un pésimo final para una película notable.

Nota sobre 10: 7










No hay comentarios:

Publicar un comentario