miércoles, 6 de mayo de 2020

Oscar 1985: Say you, say me

En 1985, Gorbachov empieza su gobierno y comienza la Perestroika, pero justo entonces, Reagan y Hollywood se vuelven más paranoicos y más anticomunistas que nunca, tardará un tiempo en aceptar la apertura y posterior ruptura del Telón de acero.

Entre el fallecimiento de Leonid Brezhnev en 1982 y los primeros meses de Mijail Gorbachov, los comunistas en los filmes de Hollywood son cada vez más pérfidos, hay donde elegir: boxeadores asesinos (Rocky IV), militares rusos que quieren explotar una bomba atómica en Alemania (Octopussy), psicópatas creados por manipulación genética y procedentes de la URSS que quieren destruir San Francisco (Panorama para matar)...

Y si no quieres caldo, tienes dos tazas: si Chuck Norris se va a cargar vietnamitas y salvar prisioneros americanos (Desaparecido en combate), Stallone hace lo mismo (Rambo II). Si los comunistas de varios paises invaden EEUU  (Amanecer rojo), Chuck Norris parará el solito otra invasión de terroristas rojos (Invasión USA). Y si en un telefilme un periodista americano es mandado a un Gulag en Siberia, a un bailarín ruso exiliado también lo metemos en la cárcel...

No recuerdo qué vi primero en 1985, si el telefilme Gulag (se estrenó en España en cines, lo vi en un programa doble de la época) o la película Noches de sol, ambos son del mismo año coinciden en la ida de olla: hacer prisionero en el Telón de acero a una persona procedente del bloque capitalista. 

Noches de sol tiene un argumento delirante: bailarín huido de la URSS que por un aterizaje de emergencia en Siberia es obligado a bailar para los comunistas con la ayuda de un bailarín desertor afroamericano (?). Sorprende ver entre los guionistas al ganador de un Oscar James Goldman (El león en invierno), si el filme no cae en el ridículo es por la habilidad de Taylor Hackford, porque hay dos grandes bailarines al frente del reparto como Mikhail Barishnikov y Gregory Haynes y por el casi siempre buen hacer de Isabella Rossellini y Helen Mirren. El director Hackford y Helen Mirren se conocieron en esta película y siguen siendo uno de los matrimonios más duraderos de Hollywood.

Sobretodo es conocida por la banda sonora. Tuvo dos canciones nominadas, Separate lives y la que ganó: Say you, say me. Compuesta e interpretada por Lionel Ritchie, se convirtió en un éxito y en un clásico de los 80. Aún no siendo muy fan de Ritchie, me parece una canción buena.

Entre las nominadas, The power of love (Regreso al futuro) y Surprise surprise (A chorus line)







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